Para reducir las emisiones de CO₂, Austrian Airlines se inclina por una optimización innovadora y continua de sus operaciones. Además de las medidas en el aire, en la plataforma del aeropuerto de Viena se está probando la idoneidad práctica del hidrógeno como proveedor de energía para realizar los necesarios trabajos de mantenimiento de los aviones.
Después de varios meses de desarrollo, el innovador generador de hidrógeno “H2Genset” de TEST-FUCHS realizará su primera operación de prueba en el aeropuerto de Viena. Este ensayo implica el suministro de energía libre de emisiones para un Airbus A320 de Austrian Airlines, utilizando un convertidor de frecuencia de alta eficiencia de Dynell. Con este plan piloto, los colaboradores del proyecto buscan facilitar el desarrollo de competencias y la adaptación a la infraestructura necesaria. El objetivo es establecer las bases para un posible uso del hidrógeno como fuente de energía móvil en el aeropuerto, contribuyendo así a una significativa reducción de la huella de CO₂.
Austrian Airlines implementa continuamente proyectos y medidas para reducir el impacto ambiental y siempre utiliza los recursos necesarios de la manera más eficiente posible. Como parte del grupo Lufthansa, Austrian Airlines se centra especialmente en la modernización acelerada de la flota, la optimización continua de las operaciones aéreas, el uso y desarrollo de combustibles de aviación sostenibles y en ofertas para viajeros privados y clientes corporativos para hacer que los viajes aéreos sean más sostenibles. El Grupo Lufthansa aspira a alcanzar un equilibrio neutro de CO₂ de aquí a 2050 mediante medidas de reducción y compensación. Para 2030, el Grupo Lufthansa quiere reducir a la mitad sus emisiones netas de CO₂ en comparación con 2019 mediante medidas de reducción y compensación.